La noticia de un recién nacido hallado en la calle este domingo sacudió a los lasherinos. Mientras el pequeño Joaquín ya se recupera en el hospital, muchos mendocinos ofrecen su ayuda.

La empleada municipal Mónica Riveros (45) jamás sospechó lo que iba a ocurrirle el domingo pasado. A poco de despertarse, abrió la puerta de su casa en Las Heras y vio que al lado de un árbol había un manojo de frazadas. Entre las telas, con frío, respiraba un niño recién nacido. Todavía tenía el cordón umbilical.

«Me acerqué y abrí las frazadas: ¡adentro había un bebé!» (Mónica Riveros).

 “Yo tengo mi cuarto que da a la calle, y escuchaba ladrar a los perros. Entonces corrí la cortina y vi que había un bulto. Cuando salí, me acerqué y abrí las frazadas. Adentro había un bebé”, comentó Mónica en la mañana del lunes, durante una entrevista con Radio Nihuil.
Mónica le dio calor al neonato y lo entró a su casa. Los médicos reconocerían luego el valor de esa acción, ya que se cree que el bebé padecía un leve cuadro de hipotermia. “Me di cuenta de que era un recién nacido porque tenía rastros de sangre y el cordón umbilical mal cortado”, comentó Riveros.

«Por acá suelen andar perros callejeros. Suerte que no lo encontraron» (Mónica Riveros).

El nene no lloraba. Riveros: “estaba dormidito, ni siquiera abrió los ojos, solo se escuchaban algunos quejidos suaves. Yo creo que no debe haber estado mucho tiempo ahí afuera, porque no estaba tan frío. El riesgo que sí corrió tiene que ver con los perros callejeros, que suelen merodear. Pero por suerte no lo encontraron”.
Al rato llegó la policía y el nene fue trasladado al Hospital Ramón Carrillo, donde quedó internado en neonatología. Las enfermeras lo bautizaron con el nombre de Joaquín.
El bebé estaba en la calle, envuelto en frazadas.

Reacción de la comunidad

En el barrio se sabe que Mónica hace trabajo social y es una persona solidaria. Acaso por eso le dejaron el niño en la puerta. No obstante, el resto de la comunidad también reaccionó ante la noticia.
Tanto desde la Municipalidad de Las Heras como desde las redes sociales y el barrio, la reacción no se hizo esperar.  Llegaron pañales, una cunita y ropa.

«Joaquín tiene un peso de 2,620 kg. No está mal para un nene de 38 semanas» (Diego Irigo, director del Hospital Carrillo).

Mientras, en el Hospital Carrillo evaluaban la situación del niño. Así se supo que había nacido tras 38 semanas de gestación, con un peso de 2,620 kg. Diego Irigo, director del nosocomio, detalló que «se trata de un buen peso» y que luego de las primeras atenciones el bebé «ya estaba tomando sorbos de leche».
Por su parte, Mónica admite que quiere seguir en contacto con el niño. “Me gustaría acompañarlo de acá en adelante. Estoy segura de que conseguirá una familia y estará muy bien cuidado”.

Otros bebés

Según se informó, el de Joaquín es el cuarto caso de abandono de bebés en la vía pública que se registra desde 2015.
Riveros cree que las mamás de estos niños estaban en una situación desesperada. “Y te da dolor, porque la madre de Joaquín podría haber hecho un montón de cosas antes de exponerlo a ese peligro. Podría haber hablado con alguna organización, o al menos dejarlo en un hospital”, dijo la vecina.

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