Sede central de Google en California (Foto: Shutterstock).

Bajo el sistema fiscal vigente, que data de la década de 1920, las empresas solo están sujetas a aranceles sobre sus ganancias comerciales en las jurisdicciones donde cuentan con un establecimiento permanente.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó un documento con el que pretende actualizar el marco legal sobre el que los gigantes digitales operan a lo largo y ancho del globo. Como parte del mismo, propuso que la presencia física de una empresa en un país deje de ser un requisito indispensable para gravar la actividad que desarrolla.
Actualmente, compañías como Google, Facebook o Apple están exentas del pago de impuestos en aquellas jurisdicciones a las que venden sus servicios desde el extranjero, situación que generó múltiples reclamos.
Según el sistema fiscal vigente, las empresas no residentes solo están sujetas a aranceles sobre sus ganancias comerciales si cuentan con un establecimiento permanente en el país donde obtienen beneficios, regla que fue aprovechada al máximo por los gigantes digitales.
Ante esta situación, la OCDE difundió el miércoles una propuesta en la que destacó que las normas actuales, que datan de la década de 1920, «ya no son suficientes para garantizar una asignación equitativa de los derechos fiscales en un mundo cada vez más globalizado», y que la aplicación de los mismos «no puede circunscribirse exclusivamente en función de la presencia física».
Conscientes de que el cambio en el sistema será una realidad más temprano que tarde, los gigantes tecnológicos apoyaron la iniciativa, pero pidieron una solución «consensuada». Así, compañías como Amazon requirieron una nueva regulación que prevenga una posible doble imposición -es decir, que el mismo impuesto se cobre más de una vez-, y que evite la creación de «medidas unilaterales distorsionadoras» por parte de los países.
En tanto, la propuesta del organismo, que sostiene que «las jurisdicciones que actualmente no pueden gravar a los gigantes digitales podrán hacerlo», será sometida a consulta pública durante el mes de noviembre con miras a alcanzar un acuerdo en enero de 2020.
«Este plan reúne elementos comunes de las propuestas existentes, que involucran a más de 130 países, con aportaciones de gobiernos, empresas y la sociedad civil y nos acerca al objetivo final de garantizar que todas las multinacionales paguen su parte justa», afirmó el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, durante la presentación de la iniciativa en París.
Por último, el funcionario advirtió que, de no concretarse un acuerdo, «aumentaría en gran medida el riesgo de que los países actúen unilateralmente», con consecuencias negativas para la economía mundial. «No debemos permitir que eso suceda «, finalizó.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *