El abogado del cantante sostuvo que eso «facilitaría un mejor funcionamiento familiar con sus hijos volviendo al calor del hogar» y la familia de las víctimas creen que sería un «trato privilegiado».

Rubén Castiñeiras, más conocido como «El Pepo», está detenido en la cárcel de Dolores por manejar alcoholizado y drogado, a exceso de velocidad, chocar y, como consecuencia, dejar dos personas fallecidas: su representante Ignacio Abosaleh y su trompetista Nicolás Carabajal.
Ahora, desde la defensa solicitan la prisión domiciliaria, pero los familiares de las víctimas creen que de otorgarle ese beneficio, le estarían dando un trato privilegiado.
El abogado del Pepo, Miguel Ángel Pierri, sostuvo: «Existe la imperiosa necesidad de que mi ahijado procesal sea cuidado por su esposa conforme lo indicado por el doctor Enrique De Rosa en su informe médico. Eso posibilitará un mayor funcionamiento de la psiquis y recuperación del estado de ánimo del imputado a fin de revertir el pozo depresivo que atraviesa desde el día del hecho».
Sobre el pedido, Pierri justificó: «Esto facilitaría un mejor funcionamiento familiar con sus hijos volviendo al calor del hogar. En el régimen de prisión domiciliaria no existe obligación de hacerse cargo del imputado, pero a fin de aseverar la seriedad del pedido, su cónyuge asumirá su cuidado y sustento económico asumiendo el compromiso en forma juratoria».
Pero por otra parte, el abogado Marcelo Biondi que representa a los familiares de las víctimas fatales, remarcó que no deben permitir este «trato privilegiado»:  «Hay términos que no existen dentro de la psiquiatría y que son mas del ámbito coloquial. Este informe no está hecho por un especialista en la materia de psiquiatría».
«La psiquis como estructura es un orden mental basado en el funcionamiento del intelecto, la emoción y la voluntad que en su casa la pueda mejorar o no no es un tema trascendente. Todas las personas privadas de su libertad tiene un compromiso de su psiquis. Esto no puede ser una excusa para salir del ambiente carcelario», profundizó Biondi.
Sobre los argumentos presentados por Miguel Ángel Pierri, comentó: «El término pozo depresivo no existe dentro de la psiquiatría, en todo caso hablamos de un trastorno del estado del ánimo, cosa que es muy frecuente en el ambiente carcelario y que hoy en día, con todos los avances que hubo en la psiquiatría y en la psicofarmacología, esto tranquilamente se puede tratar de manera ambulatoria con excelentes resultados».
«El informe de solicitud de arresto domiciliario no tiene la validez científica ni el conocimiento en la especialidad como para justificar algún tipo de morigeración de una pena por temas de salud mental», cerró el abogado de la familia de los fallecidos en el accidente en la madrugada del 20 de julio en el kilómetro 8,5 de la Ruta 63 mano hacia la costa atlántica.

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